La carrera de Licenciatura en Geografía figura en los planes de estudio de gran parte de las universidades del mundo y se ubica frecuentemente en diferentes departamentos y facultades. En general, en Asia, Europa Oriental y algunos países anglo-sajones se encuentra en Facultades de Ciencias, Ciencias Naturales o Geociencias. En Iberoamérica, en lo fundamental se ubica en las Facultades de Humanidades. Esto demuestra la orientación diversa que se le otorga en los diferentes países. En Europa y Asia, la profesión del geógrafo ha estado vinculada fundamentalmente con las ciencias naturales, mientras que en Iberoamérica se ha dado énfasis a la vertiente pedagógica y humanística en la formación del profesional. Sin embargo, en no pocos casos, el geógrafo profesional se ha vinculado a otras esferas del saber. Se dan así casos, de la formación de Ingenieros Geógrafos, más asociados con un perfil ingenieril; se citan casos de pertenencia de la Carrera de Geografía a la Ingeniería Forestal, e incluso a las Matemáticas.

En Cuba, antes de la Revolución, el geógrafo se formaba en la antigua Facultad de Filosofía y Letras como una especialidad pedagógica. Con la Reforma Universitaria de 1962, se establece la Escuela de Geografía dentro de la Facultad de Ciencias. A partir de 1976 con los cambios estructurales en la educación superior y el desarrollo alcanzado en las ciencias geográficas en el país se crea la Facultad de Geografía en 1979, como única entidad donde se forman geógrafos profesionales.

La formación de este profesional comúnmente se ha dividido en dos ramas fundamentales: la geografía física y la geografía humana. De acuerdo a las peculiaridades del desarrollo de esta ciencia y los intereses de cada país, se forman especialistas en temáticas particulares de la Geografía, tales como geógrafos del turismo, cartógrafos, geomorfólogos, oceanógrafos y otros. La tendencia actual, a nivel mundial, es a la formación de un geógrafo integral en los estudios de pregrado, con especialización en nivel de posgrado (especializaciones, maestrías y doctorados).

El geógrafo, como profesional se considera como un especialista del espacio y del territorio. Es capaz de ser portador de un enfoque espacial, o sea de un pensamiento dirigido a comprender la espacialidad, como fenómeno y como proceso en el cual tienen que ver todos los objetos, las actividades e incluso la población en su localización, distribución y articulación en la superficie del planeta.

Dadas las características de esta profesión, la formación general del geógrafo es amplia e integradora y su campo de ubicación abarca fundamentalmente organismos de la planificación y gestión ambiental de los territorios, centros de investigación científica y en la educación superior. En los últimos años, debido a la importancia que requiere la percepción espacial en la formación de las conductas y comportamientos de la población, el geógrafo pudiera ser utilizado cada vez más como un facilitador de la promoción social y cultural, sobre todo a nivel local y regional.